Equipo interdisciplinario del humedal de Córdoba

Un derecho colectivo hecho realidad

Las garzas, escasas y esporádicas

La contaminación del agua en el humedal de Córdoba, como en cualquier ecosistema acuático, limita la posibilidad de contar con una buena población de peces, ranas, crustáceos, entre otros, en consecuencia aves como las garzas pescadoras son muy escasas.

Hasta julio del año 2024 se observaba una buena variedad de garzas, en el espejo de agua junto al club choquenzá, donde había peces, hasta cuando la Empresa de Acueducto construyó un colector pluvial plagado de aguas residuales que lo contaminó y deterioró.

Garcita migratoria, Butorides virescens

En ciertas épocas del año es posible ver a la garza real, en otros espejos de agua, cazando ranas o los pocos peces que todavía sobreviven, a pesar de la falta del flujo constante del agua del caudal ecológico.

Por ello fue una bonita sorpresa encontrar a la garza nieve (Egretta thula), en el sector 2, en la mañana del sábado 31 de mayo, después de diez años de no haber sido registrada en ningún censo de aves. Estaba en la orilla del espejo de agua, muy quieta y concentrada, aguardando por alguna presa.

Egretta thula (un juvenil), en la zona fuente del sector 2, en un área de conservación estricta.
Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp