A principio de mayo terminaron de regresar al norte las últimas aves migratorias que todavía estaban en el humedal de Córdoba, buscando alimento y preparándose para su largo viaje.
Sin embargo, en la mañana del sábado 3 de junio, nueve patos canadienses (Spatula discors), la mayoría machos, dieron la sorpresa de mostrar su presencia en el gran espejo del sector tres, se quedaron compartiendo el mismo espacio junto con tinguas, ibis, garzas y monjitas. Puede que como sucedió en el año 2015, tengan polluelos y luego regresen a su lugar de origen en la próxima oleada migratoria.
Junto con éllos había otro pato, también muy especial, una especie que desde su llegada al humedal de Córdoba, en el año 2010, nunca había habitado esta zona, era el Pato turrio (Oxyura jamaicensis), con tres individuos, un macho y dos hembras. Ojalá, como ocurrió en el sector 2, se reproduzcan y aumenten su población para quedarse allí por décadas!